Practicar el dibujo nos enseña muchos conceptos sobre la importancia de la representación iconográfica para nuestro pensamiento. ¿Por qué es importante aprender a representar? ¿ Qué nos enseña el dibujo?
- Nos ayuda a plantear un encuadre correcto de nuestra composición.
- El dibujo nos invita a relacionar elementos entre sí, mediante conexiones internas: líneas imaginarias que generan ritmos y equilibrios.
- A través del dibujo analizamos la cercanía o lejanía de los elementos de mi composición. El objeto que está más cerca de mí está más cerca del borde inferior del papel; el que está más lejos, más arriba. De esta manera ellos se reparten su espacio y generan profundidad.
- A través del dibujo establecemos reparto de luces, también llamado claroscuro. El correcto reparto de luces y sombras genera la sensación de volumen. El dibujo nos enseña a representar dónde está la luz, la sombra propia del objeto, y la sombra arrojada. Estos tres elementos bien repartidos y definidos crean por sí mismos sensación de espacio y volumen.
Trabajar con gamas monocromas enseña a comprender la importancia del contraste en sus diferentes claves tonales. La clave tonal ayuda a representar un estado de ánimo o una atmósfera concreta. Un fondo de tonos claros muy luminosos con pequeños toques oscuros es una clave alta, mientras que la clave tonal baja se representa por pequeñas luces en un fondo de grandes zonas oscuras, como por ejemplo un paisaje nocturno iluminado por la luz de la luna.
A las personas que acuden a nuestro taller les aconsejamos comenzar dibujando del natural, con la técnica del carboncillo, en un tamaño DIN-A3, y sobre un soporte colocado en vertical, sobre el caballete. Con ello educamos el pulso para sostener el brazo y la mano alzados mientras dibujamos. Este proceso de dibujo tiene sus diferencias con respecto a los pequeños bosquejos que hacemos a lápiz, ya que las complicaciones son mayores cuanto mayor es el formato. Al no apoyar la mano, tenemos que trabajar el equilibrio de nuestro pulso.
Esto va a servir como entrenamiento para cuando se realicen creaciones pictóricas, en las que trabajaremos mediante el uso de pincel. De este modo aprenderemos a no restregar la mano sobre el soporte, y a pintar con la mano alzada.